La seguridad y salud de los trabajadores es una obligación que todo empresario debe garantizar en el entorno laboral. A pesar de todos los esfuerzos, el riesgo de que ocurra un accidente siempre existe, y es fundamental conocer las responsabilidades que esto puede conllevar para el empleador. Por ello, a continuación desarrollaremos los aspectos más importantes de la responsabilidad del empresario en caso de accidente, junto con las medidas preventivas que pueden minimizar el riesgo.
La Ley de Prevención de Riesgos Laborales establece en su artículo 14.2 que el empresario debe garantizar la seguridad y salud de los trabajadores a su servicio en todos los aspectos relacionados con su actividad laboral. Sin embargo, es importante destacar que esta obligación es de medios, no de resultados. Es decir, siempre y cuando el empresario demuestre que ha implementado todas las medidas preventivas necesarias, no se le podrá atribuir responsabilidad por un accidente que haya ocurrido pese a estos esfuerzos.
La normativa en materia de prevención de riesgos laborales detalla las diferentes responsabilidades que pueden derivarse del incumplimiento de sus obligaciones:
Se origina cuando el empresario no cumple con la normativa de prevención, y puede ser sancionado con multas, suspensión temporal de actividades o incluso el cierre del centro de trabajo. Además, en caso de accidente, la ley prevé el recargo de prestaciones económicas entre un 30% y 50%, a cargo del empresario.
El Código Penal tipifica el delito contra la seguridad y salud en el trabajo cuando no se facilitan los medios necesarios para desempeñar las labores con las medidas de seguridad adecuadas. Este delito se puede aplicar aun cuando no haya habido un accidente, si se pone en peligro la integridad del trabajador.
El empresario puede ser demandado civilmente en dos casos: como responsabilidad derivada de un delito o por incumplimiento de sus obligaciones contractuales, como es el deber de garantizar la seguridad de sus empleados.
A pesar de que el empresario adopte todas las medidas preventivas necesarias, los accidentes pueden suceder. Para evitar poner en riesgo su patrimonio personal y el de la empresa, desde Fisela | Grupo FSL Gestión de Riesgos recomendamos contratar un Seguro de Responsabilidad Civil y Accidentes de Convenio. Este tipo de seguro cubre los posibles perjuicios económicos, materiales y personales que puedan derivarse de un incidente en el entorno laboral.
Existen diferentes modalidades de seguros que se ajustan a las necesidades de cada empresa. Algunas coberturas que se deben considerar son:
Cubre las reclamaciones de daños personales de los trabajadores tras un accidente laboral.
Protege frente a daños a terceros durante el desarrollo de la actividad laboral.
Cubre percances en el local donde se realiza la actividad empresarial.
Cubre los daños causados por el producto, incluso después de su entrega.
La prevención es la clave para minimizar el riesgo de accidentes, pero es esencial estar preparado para cualquier eventualidad. En Fisela | Grupo FSL Gestión de Riesgos, te ofrecemos asesoramiento para contratar el seguro adecuado. Si tienes alguna duda o necesitas asesoramiento para contratar el seguro adecuado para tu empresa, podemos orientarte en esta selección.